Caciques campeón

Por:
Orlando Russo Díaz
Jefe de Prensa y Comunicaciones
Federación Colombiana de Fútbol de Salón

La historia podrá recordar que al equipo Ángeles de Bogotá le faltaron 41 segundos para asegurar el título; pero también deberá prevalecer el hecho de que Caciques del Quindío jugó un segundo tiempo perfecto y que el tiro libre sin barrera de Marco Colina premió su esfuerzo y su jerarquía en el partido de vuelta de la gran final de la X Copa Profesional de Microfútbol, que hizo suya ganando por obligación en el tiempo reglamentario 2-1 y sentenciando su suerte en lo más alto del podio minutos después, mediante la tanda de penales, con un arquero Diego Moreno inmenso, inspirado, superlativo e invencible, que atajó los tres cobros capitalinos, corrigiendo una y otra vez la también falta de efectividad de sus compañeros desde los seis metros, hasta cuando Kevin Pineda selló su triunfo.

El primer tiempo fue de estudio realmente: los dos no se hicieron daño y se fueron al descanso con un lánguido empate sin goles, con un Ángeles sin apuros y un Caciques haciendo uso de la paciencia mientras encontraban la seguridad de ir por el partido, el que necesitaban ganar para obligar la tanda de penales en la que cualquier favoritismo queda reducido a cero.

Pero a los cuatro minutos de la etapa complementaria, Ángeles se puso a ganar con la anotación, desde el piso, del máximo artilleros de la Copa, Jhon Jairo Pinilla, quien, con su trigésimo séptimo gol de la temporada, aproximaba a su equipo a lo que, se presumía, sería el partido de la consagración tras su victoria en Calarcá el sábado anterior 5-3. Pero los quindianos siguieron apretando marcas y aprovechando las ocasiones en las que el propio Pinilla salía buscando un nuevo aire.

En los siguientes ocho minutos pudieron sortear sus malos momentos y aguantaron a un local que no se sintió como tal, porque con un Cayetano Cañizares casi vacío, sólo algunos familiares de los protagonistas de los dos equipos, ese plus resultó frustrante, pero muy reconfortante para la visita, que con otra actitud, jugándole de tú a tú a los bogotanos y con reiteradas llegadas al arco dirigido por Carlos Santofimio, vino a encontrar el premio con el golazo desde media distancia del venezolano Marco Colina.

Transcurría el minuto 12 del segundo tiempo cuando Caciques acortaba distancias con la igualdad sin dejar de bajar el ritmo, presionando desde el campo de Ángeles y con una marca asfixiante hombre a hombre. Al recuperar muy rápidamente el balón, los bogotanos cayeron en sucesivas faltas que al final originaron la sexta consecutiva que capitalizaría el propio Colina, fusilando a Santofimio a menos 19 segundos de terminar el partido.

Como era de esperarse, Caciques se defendió hasta con los dientes para finalizar el encuentro con un 2-1 que los obligó a irse a los penales.

Ángeles tomó precauciones, segundos antes de terminar el partido, sustituyendo a Santofimio por Sigilfredo Bernal, un arquero que se caracteriza precisamente por sus antecedentes de ‘ataja-penales’, como en efecto sucedió, pues se hizo a dos de los cobros (Colina-Rentería), pero sin la colaboración, al final, de Wilman Urueña, Éder Burgos y Joan Sebastián Orjuela, quienes se encontraron con una tapia llamada Moreno, el arquero de Caciques.

Al final fue uno de los estandartes de esta temporada del quinteto quindiano, Kevin Pineda, quien puso punto final a esta historia que ubicó a Caciques como el octavo quinteto que se corona campeón en 10 años de Copa.

La tercera fue la vencida para Caciques después de sus dos frustraciones en el pasado en condición de local, la última en 2017, en una temporada redonda que incluyó también el título de la Copa de Las Américas.

Felicitaciones a Caciques del Quindío, flamante campeón de la X Copa Profesional Masculina de Microfútbol.