Eduardo Riaño García “Chucky” es un bogotano de 21 años de edad, jugador de fútbol sala, estudiante de Gestión Deportiva en la Universidad Sergio Arboleda, desde enero de 2020 está en Malta, país insular de la Unión Europea, situado al sur de Italia. Soñaba con llegar a Europa y se le hizo realidad, fue contratado por el Swieqi United Football Club,

Entre sus muchos logros, pese a su corta edad, los más recientes son los títulos obtenidos con la Selección Bogotá en los Juegos Nacionales Bolívar 2019 y en el Campeonato Nacional Sub 21 de Fútbol Sala 2019.

Bogotá Campeón Nacional Sub 21 de Fútbol Sala 2019
Bogotá Campeón Juegos Nacional Bolívar 2019

La pandemia…

“Estoy en Malta, es una isla cerca a Italia, desde enero ya llevo 4 meses, juego fútbol sala, estudio inglés. He tenido el apoyo incondicional de la familia, con video llamadas, mensajes. Todo eso lo motiva a uno mucho, lo hacen sentir más cerca y claro está, uno tiene que estar mentalmente fuerte”

“Estar solo, a distancia, fue una adaptación muy difícil, pero con la seguridad del apoyo que nos brinda Diosito, pienso que no me encuentro solo, sino que siempre Él está ahí, al lado mío, compartiendo esta linda experiencia, esta oportunidad que me ha dado y las personas de acá me han tratado muy bien”

“Como deportista yo creo que esto es una oportunidad para que todos entendamos que debemos trabajar a conciencia, que debemos ser jugadores íntegros y no esperar a que nadie nos esté mirando para realizar nuestras actividades, sino tener compromiso nosotros mismos, para de esta manera ejecutar cada una de las actividades que nos proponemos”

“En el ámbito deportivo dedico mucho tiempo a entrenar, lo que yo siento, de verdad, esta situación es una oportunidad que Dios nos brinda para entender que debemos cada día hacer el bien, disfrutar cada una de las cosas que Él nos brinda y hacer su voluntad a la perfección”

«Voy a entrenar a una cancha de barrio que está abierta. No he podido ir a entrenar al coliseo porque no está abierto y el equipo no lo permite. Acá ya se acabó la cuarentena, pero seguimos con mucha responsabilidad, respetando cada uno estos momentos, porque si yo estoy consciente de lo que está pasando, me quedo en casa para proteger a los demás»

Su familia…

“Somos 4 hermanos, mi hermano mayor Óscar Fernando, yo soy el segundo, sigue mi hermano Juan David y mi hermanita Kivelli. Mi papá es pensionado del Ejército Nacional y mi mamá es ama de casa.

Sus características, cualidades, fortalezas y debilidades como jugador…

“Como jugador siento que me gusta ser un líder integro, no seguir caminos, ni ser más que otros, sino que todos nos ayudemos entre todos, siendo un líder dentro y fuera de la cancha, siempre con la mentalidad de ayudar a los demás, para que de esta manera entre todos podamos lograr el objetivo quedar campeones y sobre todo trabajando en equipo”

“Mi posición en el campo de juego es de pivot falso. Juego adelante, me gusta el gol y soy muy feliz cada vez que anoto. Juego mucho a la finta, esa es una característica, que me gusta fintar mucho y jugar a la espalda del rival, para ganar profundidad y generarle mucha profundidad al equipo y peligro al rival” 

“Mi fortaleza es la agilidad porque por medio de ella puedo ganarle en segundos al rival, con solo una finta. También mi fortaleza es hacer el gol, me gusta, me encanta y es una sensación muy bonita que nunca cambiaria”

“Debo mejorar la marca y estoy trabajando en ello cada día para ser el mejor, marcar, recuperar el balón más rápido y de esta manera ayudarle más al equipo para que no vaya a sentir un jugador menos en la cancha”

Su recorrido y experiencia en el fútbol sala…

“En el futbol sala inicié jugando en Tunja, departamento de Boyacá, allá empecé con el Club La Nueva Familia, en ese club me formé con el profesor Ricardo Ortegón, quien me brindó toda su confianza. Allí en Tunja jugué 4 años, durante los cuales me escogieron 2 veces para la Selección Boyacá, para ir a representarlos en los Juegos Nacionales, en los cuales quedé 2 veces subcampeón”

“Después viaje a Duitama, donde no hubo tanta competencia, entonces jugué futbol 1 año, intercolegiados y quede subcampeón con el Colegio La Nueva Familia”

“Posteriormente, a los 13 años viajé a Bogotá, allí jugaba con mi primo y con mi hermano categorías mayores, entonces me vio jugando don Víctor del Club Futsal City, quien me contactó y me dijo que si quería venir a entrenar con su club para jugar unos preselectivos”

“Fuimos a jugar preselectivos, nos escogieron para la Selección Bogotá y se me empezaron a abrir muchas puertas, gracias a don Víctor y también a David Jiménez. Volvimos a jugar preselectivo y así empezamos un proyecto chévere que fue ir a jugar a Brasil un suramericano con el Club Futsal City. Llegamos de allá, fuimos a jugar un mundial, nos escogieron para jugar un mundial en Paraguay, donde hicimos un gran papel por el talento del equipo”

“Al volver de Paraguay se viene una sensación muy bonita que es el fútbol sala, porque queríamos sentir que tan bueno era el fútbol sala y nos dio muy buenas perspectivas, nos generó una motivación más para jugar contra los mejores e iniciamos un proyecto para ir a España a jugar contra Barcelona, contra el equipo de Rusia, un equipo de Japón, Estados Unidos, un equipo brasileño y otro equipo español. Allá hicimos un gran papel y aunque también había jugado fútbol sala con La Nueva Familia, ahí empezó la sensación más bonita, esto fue una oportunidad que nos abrió mucho la mente para decidir que debíamos trabajar más y seguir entrenando con sacrificio, con compromiso, para poder algún día estar al nivel de ellos para que ellos también piensen en enfrentarnos”

“Al regresar de España se nos abrieron las puertas en la Universidad Sergio Arboleda donde nos dieron becas deportivas para representar a la universidad y de esta manera también adelantar nuestros estudios de una manera equilibrada”

“Jugamos con la Universidad Sergio Arboleda y nos escogieron para la selección Colombia de Fútbol Sala Sub 20, para representar al país en un suramericano en Perú. En Perú claro, nosotros no pensábamos que el nivel fuera tan alto, pero si, quedamos en el quinto lugar”

“Después de Perú quedamos 2 veces campeones con la selección Bogotá de Fútbol Sala en Bogotá y en Bolívar en Juegos Nacionales”

“Luego nos escogieron para la Selección Colombia de Fútbol Sala e ir a representar a nuestro país en Ecuador”

“Antes del Nacional hubo una Liga Suramericana en Rio de Janeiro, Brasil, donde quedamos de segundos contra Brasil, que nos ganó por diferencia de gol y cumplimos un gran papel, anoté varios goles como en Perú”

“Después nos dieron la oportunidad de representar a Colombia y la base de esa selección fue la selección Bogotá, en la cual hice un gran papel, en cada partido anoté un gol, en otro 2 y así sucesivamente. Fue una bendición y gracias a Dios allí nos coronamos campeones”

“También el año pasado tuve la oportunidad de jugar en Saeta, que fue una gran experiencia, un gran equipo y se vivieron grandes momentos, pues no venía en un gran momento, pero lo supe aprovechar al máximo y fue una oportunidad muy bonita, creo que también aprendí muchísimo en Saeta, fue una linda experiencia”

El viaje a Malta…

“Luego de la Liga de Ecuador y de los Nacionales y de coronarnos campeones con la Selección Bogotá, ya estaba decidido a estudiar en la Universidad Sergio Arboleda, y llegó esta oportunidad de Malta, una bendición que me brindó Diosito de llegar aquí”

“Fue en 10 días, en un momento, me sorprendió, no creía, mi novia me decía que si me iba a ir y que si me iba a ir. Yo no creía, porque siempre que le piden a uno jugar en otro país, le exigen el pasaporte europeo, que es difícil de obtener, porque había que hacer muchos papeles, debía tener un familiar que viviera en Europa”

“Ya había entrado a estudiar a la Universidad Sergio Arboleda, ya había hablado con David, porque me habían pedido el pasaporte europeo, pasaban los días, en la casa no tenía wi fi entonces pedía el favor, me hablaban en inglés, tenía que pedirle ayuda a mi prima para que me ayudara a traducir”

“Empezamos así, más o menos en una semana, el lunes digamos, me escribieron, mi prima me traducía, me habían dicho que, si quería ir a jugar a Malta, que, si me gustaría, respondí que sí, que era una oportunidad muy bonita, pero yo no creía”

“Al siguiente día me pidieron más cosas, envíanos tu currículo deportivo, después me concretaron ¿te gustaría?, ¿estás dispuesto a venirte a jugar cuando te digamos?  o ¿tienes algún problema? Respondí, no tengo problema, yo voy de una y fue así como a los 3 días me pidieron las fotos del pasaporte, la ficha deportiva, un traspaso y me enviaron el contrato”.

“Aún no lo creía y un día por la mañana, como a los 4 días, habíamos jugado un partido amistoso contra la selección Colombia y Camilo Gómez me dijo que le habían escrito. Él me recomendó muy bien, gracias también a él estoy aquí en Malta y le agradezco muchísimo, es una gran persona, un gran ser humano, me ha enseñado muchas cosas, es un gran hermano y un ídolo que siempre de pequeño seguí. Entonces jugamos contra la selección Colombia fútbol sala allá en el Cayetano y al terminar el partido Camilo me dijo que me había recomendado muy bien para jugar en Malta, entonces yo pensé uyyy va a ser verdad, aunque dudaba, porque era difícil”

“Un día por la tarde me enviaron el contrato, lo firmé, lo envié de una vez y pensé, uff digamos, hoy es martes, viajas el jueves. Fue una alegría, un momento muy único”

“Cuando fui a viajar me pusieron problema porque no tenía vuelo de vuelta, entonces yo le decía Diosito, si tú quieres esto para mí, entonces si no puedo viajar es tu voluntad padre, y todo salió muy bien gracias a Dios, viajé”

Malta…

“Aquí me recibieron muy bien, el personal es muy amable, el club, todos, un gran club, se llama Swieqi United Football Club, me han enseñado varias cosas, aquí en Malta he aprendido tantas cosas. Uno mentalmente se vuelve muy fuerte, creo que voy a seguir trabajando duro para ser el mejor, voy a seguir trabajando duro para poderle brindar lo mejor a Colombia y poder no solo pensar en mí, sino poder ayudarle a los demás, a los que vienen atrás, mostrarles que, si se puede, que no es solo un consejo, que, si se puede todo, siempre que pongan a Dios por delante de cualquier cosa”

“Todo se puede diosito hace cosas, uno no cree cuando ¡pum! y eso es el resultado del trabajo, del sacrificio que uno le brinda a sus sueños”

Escogió el fútbol sala entre otros deportes…

“Escogí el futbol sala primeramente porque quería. Jugué futbol de salón, me gustó muchísimo, ahí fue donde inicie, pero cuando ganamos el mundial, uno quiere experimentar más entonces, dije, uff me gustaría jugar en España, yo quiero jugar en España, o en Italia, en una liga competitiva de fútbol sala y ya veía videos de España y todo eso”

“Pensé y ¿por qué no fútbol?, pero desafortunadamente en nuestro país la estatura cuenta, por talla era difícil, entonces no escogí el fútbol por este motivo y porque en nuestro país no hay una buena vibra en el fútbol”

“Entonces escogí el fútbol sala, me gusta, me encanta porque es un juego rápido, cuando uno tiene que tomar una decisión debe hacerlo en milésimas de segundos y porque es el juego de barrio, porque hay una oportunidad grande, porque debemos aprovechar todos nosotros, porque es de mejorar los fundamentos y es un deporte que siempre lo enseña a uno a mejorar cada día”

Títulos alcanzados…

“Con la selección Boyacá quedamos sub campeones dos veces, una en Yopal y otra en Bogotá”

“Cuando viaje a Bogotá con la selección Bogotá de Futbol de Salón quedamos de terceros en Popayán”

“Con Futsal City Atlas ganamos en Brasil, llegamos de Brasil fuimos al mundial donde ganamos el mundial. En Barcelona, quedamos subcampeones contra Barcelona de fútbol sala, fue un mundial de clubes en Planes España”

“Después en Perú con la selección Colombia de Fútbol Sala quedamos de quintos en un suramericano”

“Luego fuimos a jugar una Liga Suramericana en Brasil, en Rio de Janeiro, donde quedamos de segundos, por diferencia de gol ganó Brasil”

“En Ecuador con la Selección Colombia de Fútbol Sala, quedamos campeones en la Liga Suramericana”

“Con la Selección Bogotá ganamos Juegos Nacionales, uno en Bogotá y otro, el oficial en Bolívar donde quedamos campeones”

“El título que ha sido más importante y que recordaré mucho fue el de los Juegos Nacionales, porque fue una locura, fue una gran experiencia, creo que no solo para mi sino para todos”

Su sueño…

“Estar aquí en Europa era un sueño, siempre se lo pedí a Diosito y bueno, me abrió esta oportunidad tan grande que debo aprovechar al máximo”

“Mi sueño es ganar un mundial de fútbol sala”

“También sueño llegar a jugar algún día en el Inter Movistar o en el Barcelona, es un sueño que tengo muy en mente y quiero lograrlo”

Sus proyectos…

“A corto plazo es ganar aquí la Liga de Malta, aprender inglés y abrirles puertas a todos los jóvenes”

“A largo plazo es ganar un mundial de fútbol sala, ese es un proyecto en el que debo trabajar muy duro para lograrlo”

Su jugador favorito…

“Mi jugador favorito es Vinícius, el brasileño, un líder dentro y fuera de la cancha. Comandaba muy bien el grupo, lo hacía de una manera sorprendente, todos eran muy amigos de él dentro y fuera de la cancha. Me identifico con él porque vive la alegría del fútbol sala, la disfruta y eso es lo que quiero, que cada momento que juegue, lo disfrute al máximo y pueda expresarlo en la cancha y darle muchas alegrías a todas las personas que nos ven y nos siguen”

Vestir la camiseta de la Selección…

“Cuando se porta la camiseta de la selección hay una responsabilidad muy grande y siempre es un reto que te brinda Diosito, que te dice, bueno, te puse a ti para que muestres todo lo que tengas, no te guardes nada. Deseo dejar en lo más alto la camisa de la selección, es un orgullo, es un amor propio para ir a representar a Colombia”

“Nosotros somos un gran equipo un gran país y creo que todos debemos pensar en cómo organizarnos mejor, ayudarnos para que el fútbol sala crezca y no fijarnos en las envidias, no dejarnos llevar por la envidia, porque uno está en la selección Colombia, muchas personas llevan una vida muy mala, en vez de hacer subir el ánimo para que todo ande bien. Es una responsabilidad muy grande representar a Colombia, es difícil, pero para eso estamos, para que esto cambie y para que el fútbol sala de Colombia cambie”

“La Selección Colombia nos brinda la oportunidad de vestirnos con sus colores e ir a representar a nuestro país. Otro aspecto fundamental es ir a demostrar de qué estamos hechos y que ahí también se nos puede abrir la oportunidad de que nuestros sueños se cumplan, es mostrarnos en otro país, jugar contra los mejores y de esta manera lograr que a muchos se nos abran las puertas, como a mi en este momento, como me la abrieron aquí en Malta, así a otros se le pueden abrir donde Dios quiera que vayan a jugar”

“Lo que no me gusta de la selección Colombia es que a veces hay de por medio personas externas que piensan que es fácil llegar ahí, cuando en verdad es difícil”

“Tenemos con qué para ser los mejores, solo hay que confiar en los que están y trabajar duro para llegar ahí”

Amigos en el fútbol…“Son dos, Julián Pardo  y Wilson Hilarión «Cholas», ellos son hermanos gracias a este lindo deporte y con ellos en cada entrenamiento nos esforzábamos siempre para conseguir lo mejor, con ellos logramos el mundial, logramos muchos títulos y es por eso que nos tenemos un gran aprecio entre todos y creo que de eso se trata, contagiarnos de las vibras de todos para de esta manera lograr el objetivo y con ellos hemos tenido la oportunidad muy bonita de compartir muchos momentos juntos jugando este hermoso deporte«

Un mensaje…

“El mensaje que les envío a mis compañeros es que nunca dejen de soñar, que se sigan esforzando al máximo y que siempre se ayuden unos a otros y no se dejen hundir en la envidia, en vez de eso ayúdense unos a otros y de esta manera crecer mutuamente por medio de entrenamientos de buena vibra, de seguir creciendo cada día”